La fotógrafa boliviana Wara Vargas descubrió el oficio en su hogar, gracias a sus padres, ambos artistas plásticos.
Tras estudiar Comunicación Social y especializarse en fotografía de prensa, trabajó en varios medios de su país.
A través de sus fotografías muestra la vida de las mujeres y la historia de Bolivia. En la actualidad se encuentra documentando la vida de parteras tradicionales gracias a una beca de National Geographic.
¿Cómo empezaste y por qué a trabajar con la fotografía?
Inicié gracias a mi padre, que es artista plástico y un gran aficionado a la fotografía. Él me mostró el mundo del laboratorio fotográfico desde muy pequeña y me enseñó a manejar muchos tipos de cámaras analógicas.
En la escuela era la niña que fotografiaba todo y cuando llegué a la universidad con el sueño de hacer cine, una amiga, que vio que siempre tenía la cámara fotográfica conmigo, me invitó a trabajar en un semanario como fotoperiodista. Así inició mi carrera. Aprendí en la calle el oficio.
Fue una linda etapa de mi vida, estudiaba y trabajaba haciendo fotos. Agradezco mucho iniciar mi juventud como fotoperiodista, porque me ayudó a crecer acompañando muchas realidades sociales, luchas y desigualdades que han formado la persona que soy ahora.
Poco a poco mi compromiso con mi trabajo de fotoperiodista se hacía más fuerte y dejé el sueño de hacer cine para dedicarme a mi labor de fotoperiodista.
Actualmente llevo más de 15 años como fotoperiodista.
Disponer del material adecuado no es suficiente. ¿qué aptitudes o destrezas son necesarias para ser un buen profesional?
En tantos años de trabajo, pasé por cámaras muy sencillas y luego me convertí en una fotógrafa profesional y tuve muchas cámaras profesionales, con muchos lentes y equipo.
Cuando inicié, la calle y mis compañeros fueron mis maestros y solo seguía lo que veía de mis colegas fotoperiodistas con mucho equipo.
Con los años fui volviendo hacia atrás. A mi pequeña cámara con la que inicié cuando era niña.
FUNIBER comenzará a promover la especialización en fotografía en mayo. ¿La formación en este campo evita el intrusismo o siempre existirá?
Creo que el poder hacer una especialización es muy importante en la carrera de fotográfica. Si en mi país hubiera tenido esa posibilidad, sin duda que la habría tomado.
No creo que tener lugares de especialización termine con el intrusismo. Creo que hay muchas maneras de enseñar y aprender. Y sobre todo en fotografía, hay grandes fotógrafas mujeres, que no han estudiado, no son licenciadas. Pero su obra y su vida han sido su escuela y a mí me gustaría tomar clases con ellas.
Creo que son diferentes opciones de estudio y no compiten entre sí.
Como jurado, ¿qué criterios se tienen en cuenta para elegir una fotografía como ganadora?
Me gustan las fotos que generen preguntas y me dejen pensando sobre qué me está queriendo decir, a dónde me quiere llevar con su fotografía.
He visto muchas fotos y en muchos casos he visto el mismo tipo de fotos. Y cuando veo algo único, nuevo y fresco es muy reconfortante.
Además del premio en metálico y de la beca de estudio, ¿cuáles crees que son las ventajas para los fotógrafos al participar en concursos de fotografía como PHotoFUNIBER?
Mostrar tu trabajo ya es una oportunidad de dejar algo en la gente que ve tu obra. Más allá de ganar o perder, a mí me parece una gran oportunidad para que los participantes digan “aquí estoy y este es mi trabajo”.
No muestren lo que queremos ver, para ir a lo seguro. Muestren lo que quieren que veamos. Sean ustedes mismos. Que participar sea un ejercicio personal para decirnos quiénes son como fotógrafos. Si hacen este ejercicio ya han ganado.
Este último año, la pandemia de COVID ha generado un sinfín de imágenes imposibles de borrar. ¿Qué imagen o escena escogería para resumir el 2020 y por qué?
Hay dos posibilidades: puedo resumir con las imágenes de gran cantidad de ataúdes en los cementerios y hospitales, o resumir con las fotos de personas intentado salir adelante.
Quiero quedarme con las imágenes de las mujeres que están luchando por salir adelante, porque inspiran a otras personas a seguir teniendo esperanza y no dejarse vencer por el miedo y la incertidumbre económica.
Es una lucha larga y compleja, pero que las imágenes no nos quiten la esperanza.